Cabárceno, un fantástico parque de la naturaleza

El parque de la naturaleza de Cabárceno es un maravilloso destino para disfrutar de la naturaleza y de los animales con los más pequeños de la casa. No es solo un zoo al uso, donde puedes ver infinidad de animales, sino que además los verás en el entorno de unos paisajes preciosos, en una imagen de semilibertad que es difícil de encontrar en otros zoológicos donde los animales disponen de menos espacio vital. Los preciosos paisajes del parque son el resultado de la mano del hombre, pues desde la antigüedad esta zona ha sido una mina de hierro. Por eso podemos ver por muchos sitios el color rojizo en los diferentes  rincones de este paisaje kárstico.

El parque de Cabárceno es enorme y para visitarlo es necesario utilizar el coche, ya que hay más de 20 Km de carreteras internas que nos llevan de unas zonas a otras. El parque alberga numerosos ejemplares de más cien especies diferentes de animales de los cinco continentes. Las grandes especies ocupan enormes espacios, creando un ambiente más cercano a sus entornos originales. Es una gozada ver los espacios de los osos, las jirafas, los leones, los elefantes… además hay tantos que seguro que los vas a poder contemplar sin esfuerzo. El parque está maravillosamente diseñado con miradores perfectamente habilitados y que nos permiten disfrutar al máximo de los animales. Y como es tan grande no tendremos sensación de agobio por muchos visitantes que haya.

Para recorrer los diferentes recintos debemos usar el coche y desplazarnos de una zona a otra. Normalmente en cada aparcamiento hay un par de zonas de animales que podemos ver en la misma parada, o recorriendo algún sendero pequeño. A la entrada del parque  nos entregan un mapa detallado del parque para que no nos perdamos ni una sola de las zonas. En general es un recorrido en un solo sentido, por lo que no tienes pérdida. Sólo para llegar a alguna zona un  poco más recóndita  es necesario tomar algún desvío más escondido.

Una de las áreas más destacadas, aparte de las ya mencionadas,  es el recinto de los gorilas. Aparte de verlos en la zona exterior donde juegan y les alimentan hay una galería interior que mediante unas cristaleras permite verlos en una zona de descanso y de juegos. Aquí se comportan de una manera más íntima si cabe, pues es como si fuese su casa. Otra zona muy bonita es la de los osos ya que hay muchísimos y podemos verles corretear y jugar muy cerca, para regocijo de los más pequeños.

Otra de las atracciones de Cabárceno es su Terrario. Hay una colección de serpientes impresionante con algunos ejemplares realmente enormes, y las puedes ver muy de cerca, aunque afortunadamente hay cristales. Y fuera del terrario también podemos ver en un pequeño jardín unas tortugas.

También es muy divertido para los  peques las exhibiciones de aves rapaces que se hacen en el parque. Conviene consultar los horarios de estos espectáculos a la entrada del parque para no  perdérnoslos. Se hacen en un pequeño anfiteatro y las aves rapaces vuelen rozando casi la cabeza del público, y además, al final, puedes hacerte fotos sujetando algunas de las aves. También hay exhibiciones de leones marinos en la zona acuática, situada muy cerca del terrario, que se programan a diferentes horas. A lo largo del año se ofrecen todo tipo de propuestas educativas enfocadas a niños para que se sensibilicen con los problemas que afectan al planeta. También tienen la opción de realizar actividades como escalada, tirolina o tiro con arco. En definitiva hay de todo para los más pequeños.

Y desde hace poco el parque dispone de un teleférico de 6 Km, que es una verdadera atracción para toda la familia. A los niños les encanta simplemente ya el hecho de  montar en un teleférico, y encima si pueden ver los animales desde arriba es el no va más. El recorrido del teleférico está dividido en cuatro tramos que te dan acceso a puntos estratégicos del parque y a unas vistas espectaculares. Tiene un horario más reducido que el parque por lo que conviene enterarse también a la entrada.

El parque de Cabárceno se encuentra a unos 15 kilómetros de Santander, y al mismo puedes llegar desde distintas carreteras, tanto desde los pueblos de Obregón como desde el propio Cabárceno. Para visitar el parque y disfrutar de todos sus encantos hay que llegar a primera hora – consultar horarios en la web – y aprovechar el día a tope. La verdad es que exprimiendo el día a tope se puede ver el parque completo y alguno de los espectáculos, pero no nos sobrará mucho  tiempo.