El Cañón del Río Lobos, un maravilloso desfiladero en Soria

Esta ruta es un magnífico paseo por el cañón del río Lobos entre las provincias de Burgos y Soria. Son 25 kilómetros que comienzan en el parking de acceso al Cañón, en el municipio de Ucero –Soria- y finalizan en Hontoria del Pinar – Burgos-. El sendero no tiene desniveles y discurre por un camino cómodo y sin dificultades, por lo que es apto para todo tipo de senderistas. La única dificultad es la distancia total, pero a buen paso se puede recorrer en unas 6-7 horas. Eso sí, hay que gestionar el transporte para volver al punto de inicio porque la longitud de la ruta impide hacer una ida y vuelta en el mismo día.

Mapa de la ruta
                                                                                                                                       Plano de la ruta

 El Parque Natural del Cañón del Río Lobos es un espacio natural protegido y el río Lobos discurre por el cañón homónimo. Los accesos a la ruta se realizan por los municipios de sus extremos y en la parte central por el Puente de los Siete Ojos, accesible por carretera. En la entrada de Ucero se encuentra el Centro de Interpretación en un antiguo molino. Sobre Ucero, en la carretera SO-920, se encuentra el mirador de La Galiana – poco antes de llegar a Ucero - que nos da una buena panorámica desde la parte superior. Además dentro del parque podemos encontrar otros miradores como el Balconcillo del río Lobos o el Mirador de las Gullurías.

Mirador de la Galiana
                                                                                                                              Mirador de la Galiana

Empezamos la ruta en la localidad soriana de Ucero. Para llegar al inicio del sendero tenemos que ir hacia el río tras pasar por el Centro de Interpretación. Hay que mencionar que existe un aparcamiento de pago más adelante, a un kilómetro de la ermita, pero nosotros decidimos dejar el coche en el pueblo en un aparcamiento gratuito. El sendero nos lleva sin posibilidad de confusión tras algo más de tres kilómetros hasta uno de los puntos emblemáticos de la ruta, la preciosa ermita de San Bartolomé. Detrás de la ermita se encuentra la Cueva Grande, una de las muchas cuevas que podemos encontrar en la zona. Es realmente espectacular y aquí se celebran romerías. Las fotos desde la cueva hacia la ermita son muy evocadoras. Por cierto también merece la pena subir un poco por la pared del cañón para tener unas  vistas más aéreas del emplazamiento donde está la ermita. Se puede llegar hasta un ojo precioso, El Balconcillo, que hay en una de las rocas que componen las paredes del cañón. Las vistas son preciosas. También desde Ucero podemos optar por otra variante de la ruta que pasa por el mirador de las Gullurías y llega a la ermita, desde donde ya podemos seguir el cañón.

Ermita de San Bartolomé
                                                                                                                       Ermita de San Bartolomé

Tras fotografiar todo el entorno – esta es la parte más reconocible de la ruta y habrás visto  muchas fotos en folletos de turismo - cruzamos un puente de madera para iniciar la ruta que tras unos 9 Km, nos llevará al Puente de los Siete Ojos, otro punto de entrada al cañón y fin de ruta para muchos senderistas.

Vistas desde la Gran Cueva
                                                                                                                    Vistas desde la Gran Cueva

El camino hasta el  Puente de los Siete Ojos es muy cómodo, llano, y muy agradable. Tras dejar la ermita pasaremos por la zona del Colmenar de los Frailes, una impresionante pared agujereada donde podemos ver colmenas de los antiguos templarios hechas con troncos de árbol. Parte del  efecto escénico se consigue porque en este tramo se estrecha el cauce del río lo que hace que las paredes parezcan todavía más altas. Cruzamos el río varias veces ppor pasos de piedras y pasamos por la desembocadura de un arroyo en el propio Río Lobos.  Posteriormente llegamos a la zona de la fuente del Rincón donde podemos ver otra de las fantásticas cuevas del Cañón, la Cueva Negra. Hay un acceso señalizado para poder llegar a ella así que no hay pérdida posible. Tras ver la cueva seguimos hasta la zona de Las Fuentes, por donde pasa el sendero de la Cañada Real Merina (PR 49). A partir de aquí el camino se hace más sencillo si cabe pues caminamos por pista hasta llegar el Puente de los Siete Ojos, un puente muy bajito con sus 7 arcos, de ahí el nombre. Allí hay una zona recreativa donde podemos hacer un descanso para afrontar la segunda parte de la ruta. Llegar hasta aquí ya es una verdadera maravilla por los paisajes que hemos atravesado.

Puente de los Siete Ojos
                                                                                                                        Puente de los Siete Ojos

La segunda etapa del recorrido nos llevará hasta la localidad burgalesa de Hontoria del Pinar. Lo bueno de esta parte es que además de ser bella en cuanto a paisaje está mucho menos transitada, por  lo que puedes disfrutar de la naturaleza en soledad. No encontraremos secciones tan dramáticas del cañón ni lugares tan pintorescos como la ermita de San Bartolomé, pero si te gusta caminar y disfrutar de la naturaleza sí que merece la pena continuar.

Desde la zona recreativa en la que hemos hecho una parada para retomar fuerzas seguimos el  curso del río por una buena pista. El sendero va serpenteando y llegamos a la zona de la fuente de La Canaleja. En las paredes del cañón podemos contemplar diferentes agujeros y podemos ver buitres en algunas de estas oquedades  de la roca. El sendero sigue paralelo al río entre pinares por un paisaje muy agradable, aunque quizás el cañón ya menos pronunciado que en la primera etapa de la ruta. El recorrido continúa aguas arriba, internándonos en una zona donde el cañón se estrecha. Llegamos al Apretadero. Las paredes verticales y los meandros cerrados son lo más destacado de esta zona. Diferentes paneles nos van explicando características del paisaje como las surgencias de las Raideras, agua que brota del suelo cerca del cauce del río, aunque  cuando pasamos no había nada de agua. Seguimos el camino hasta llegar al Chozo de los Resineros, una sencilla construcción con troncos que servía para protegerse de las tormentas de verano.  Y un poco más adelante se llega a la salida del cañón, a Hontoria del Pinar. Antes de llegar al final del recorrido pasamos por  el área de descanso de Agualinos.

Chozo de los Resineros
                                                                                                                          Chozo de los Resineros

Hay otras variantes del sendero si no quieres caminar tanto. Dado que la parte más espectacular es la cercana a Ucero donde se encuentra la ermita de San Bartolomé – a unos 3,5 Km del inicio – se puede empezar desde Ucero y llegar hasta donde te sientas cómodo para luego volver acortando así la ruta. Una buena opción que también hace mucha gente es llegar hasta el puente de los Siete Ojos, más o menos a mitad de la ruta (12Km) y desde allí regresar. O bien desde allí contratar un transporte para que nos lleve de vuelta a Ucero. Nosotros aconsejamos la ruta completa porque merece la pena y la riqueza de paisajes es impresionante, pero si no te apetece caminar tanto existen esas otras posibilidades.

Itinerario del cañón del río Lobos: