La ascensión a la montaña Molden es una maravillosa ruta de montaña en Noruega, sobre el fiordo Lustrafjorden, uno de los brazos en los que se ramifica el Sognefjord, uno de los fiordos más espectaculares del país. Las vistas desde la cima son realmente impresionantes ya que podemos observar un recodo del fiordo en todo su esplendor con sus aguas color turquesa. La ruta es accesible para cualquiera pues no presenta ninguna dificultad. La mayor parte del recorrido se hace por sendero. Son 9 Km ida y vuelta y el recorrido supera un desnivel de unos 600 metros.
Para llegar al inicio de la ruta tomamos la carretera 55 que va de Hafslo a Marifjøra. Nos desviamos a la derecha en una bifurcación que aparece indicada como Mollandsmarki. Desde allí una carretera de gravilla nos lleva en ascenso a lo largo de 2.5 Km a una zona de aparcamiento. Desde el parking pasamos un paso canadiense y tomamos un sendero por el bosque que aparece señalizado tímidamente. Hay un panel indicando la ruta a seguir hasta la cima del monte. Seguimos este camino unos 300 metros y luego nos incorporamos a la derecha a un camino que ya aparece señalizado con marcas rojas.
Una media hora después de empezar a caminar llegamos a un primer sitio con grandes vistas – Skjoldnaklanten- desde donde hay una preciosa panorámica de las montañas Breheimen y los pueblos de alrededor aunque nada comparado con lo que estaba por llegar. Desde este punto el camino asciende bastante bruscamente y tras caminar algo menos de media hora llegamos a Svarthiller, una zona con una maravillosa vista del fiordo hacia Ornes en la otra orilla con su famosa iglesia de madera. La vista es maravillosa. En este punto hay una cabaña de madera que añade mucho encanto al paisaje. Aquí la vista hacia el norte del fiordo aparece tapada por la propia montaña que estamos subiendo por lo que nuestra vista es parcial pero ya impresionante. En total llevaremos como dos kilómetros y medio desde el principio. Si vas justo de tiempo también merece mucho la pena subir hasta aquí pues es un lugar precioso. Desde aquí hasta el final ya avanzamos por terreno completamente abierto sin árboles pro lo que las vistas son cada vez mejores.
Dejando esta maravillosa zona el camino gira bruscamente y subimos inicialmente por un escarpe mediante un camino de roca que también nos deja vistas memorables. El camino de subida nos abre la panorámica hacia el fiordo con la pintoresca caseta de Svarthiller en primer plano. Es una imagen preciosa.
Tras subir durante unos tramos el camino se nivela y llegamos a la cima que es una superficie plana muy extensa donde nos acercamos hasta el monolito que marca la cima del monte. Sin embargo el punto marcado como cima no frece las mejores vistas. Para disfrutar del impresionante mirador natural que es esta montaña tuvimos que acercarnos a una zona con unas antenas.
El viento sopla realmente fuerte y justo cuando llegamos a la cima había bastantes nubes que entorpecían la vista. Sin embargo tras pasear un rato por la cima las nubes se fueron deshaciendo bastante y pudimos disfrutar del maravilloso panorama. La mejor vista es hacia el este, sobre la parte más interna del fiordo Lustrafjorden con los pueblecitos de Nes y Høyheimsvik al fondo. Y hacia el oeste vemos el pueblo de Gaupne con el glaciar del Jostedalsbreen detrás. Desde luego las vistas mires donde mires son increíbles. Lo único que afea un poco la cima son los postes con antenas que hay allí, pero la majestuosidad del paisaje hace que te olvides de ellas enseguida.
Estuvimos bastante rato en la cima simplemente moviéndonos de un lado para otro y disfrutando de las diferentes panorámicas a pesar del insistente viento. Aprovechamos también para comer algo antes de iniciar el descenso. La bajada se hace exactamente por el mismo camino, y si en subir tardamos unas dos horas más paradas la bajada la hicimos en poco más de hora y cuarto. En definitiva, una maravillosa y sencilla excursión a uno de los mejores miradores de esta zona de los fiordos.
Ruta hasta la cima de Molden Mountain: